Mientras las organizaciones sociales continúan arribando a Lima, para participar en la “Marcha de todas las sangres”, Boluarte, leyendo desde un telepronter, envió un mensaje a la nación en el que anunció que no renunciará y agradeció a los medios de comunicación, a la Policía, y a los fiscales por defender su gobierno.
Según los medios de comunicación, los muertos en Perú fueron producto de enfrentamientos entre marchistas y las fuerzas del orden, sin embargo, no existen bajas entre la policía ni el ejercito. Mientras uno de los bandos cava fosas y arroja piedras, el otro bando tira a matar.
Ante la llegada de miles de personas desde todo el país, la policía procedió a resguardar el congreso, el palacio presidencial y los edificios donde funcionan los medios de comunicación de Lima.
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