En el campo de concentración de Guantánamo, EEUU construyó un infierno para miles de detenidos. Cientos de denuncias de vejámenes atroces, que el congreso de EEUU se niega a ver y oír. El país del norte, es el único país del mundo, donde la tortura es legal.
En Guantánamo (infierno), los presos son vejados hasta lo indecible, les sacan las uñas con alicates y los ojos con cucharillas. Los detenidos, enmanillados y con una capucha en la cabeza, son entregados a la voracidad de perros asesinos que les arrancan la piel a mordiscos, mientras los carceleros se sacan selfis junto a los presos desnudos, que gritan con todas sus fuerzas, pero el mundo no los escucha.
En su reciente informe sobre la situación de los derechos humanos en varios países del mundo, EEUU se olvidó de evaluarse a sí mismo.
La tortura y asesinato de negros y latinos, por parte de la policía, tampoco aparecen en su informe.
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